Con una concentración pública y una serie de avisos televisivos, organizaciones sociales emprendieron lo que consideran la última batalla legal para lograr el reconocimiento de la diversidad sexual.
"Sin prisa pero sin pausa"
Cerca de un centenar de parejas conformadas por personas homosexuales, bisexuales y transexuales se congregaron en la explanada municipal de Montevideo donde se tomaron las manos frente a una enorme bandera del arcoiris reclamando la aprobación del matrimonio igualitario.
Desde este martes, Día del Orgullo LGBT, ocho spots televisivos protagonizados por 34 personalidades uruguayas -entre las cuales figuran el escritor Eduardo Galeano, el periodista Víctor Hugo Morales y la actriz Natalia Oreiro- comenzarán a emitirse en dos canales de TV y a través de las redes sociales.
La campaña “expresa públicamente la necesidad de resolver el problema de inequidad jurídica que existe hoy, que establece que haya ciudadanos de clase A y ciudadanos de clase B. Algunos pueden acceder a la institución del matrimonio y otros no”, explicó Diego Sempol, del colectivo Ovejas Negras, que reúne a lesbianas, gays, bisexuales, travestis y transexuales. ”Esta campaña busca motorizar el proyecto de matrimonio igualitario a nivel parlamentario”, aseguró.
Los legisladores del gobernante Frente Amplio (izquierda, en el poder desde 2005) están estudiando actualmente un proyecto de ley para modificar la institución matrimonial como una “unión monógama libre”, celebrada entre dos personas, “sin hacer distinción de sexo o género”, declaró el diputado frenteamplista Sebastián Sabini. El proyecto “consagra una institución igualitaria, donde los derechos y obligaciones son equivalentes”, añadió. ”La perspectiva es que se apruebe este año, pero sabemos que los proyectos polémicos demoran en aprobarse”, confió el legislador.
“Hemos avanzado en Uruguay sin prisa pero sin pausa en los últimos años”, estimó Sempol, que cree que la sociedad uruguaya está “ampliamente preparada” para aceptar el matrimonio homosexual. ”Esto sería la última batalla legal a nivel parlamentario para generar esta nueva generación de derechos que reconocen la diversidad existente en la sociedad. Se ha discutido mucho, en forma intensa estos temas y se ha producido una transformación social muy importante en los últimos 10 años en Uruguay”.
Lejos de darse por satisfecho si se logra la aprobación parlamentaria del matrimonio entre personas del mismo sexo, el colectivo planea “seguir desarrollando la construcción de políticas públicas y educación sexual en el sistema educativo”, donde, según Sempol, “hay un fuerte problema de acoso escolar a las chicas trans y a la población gay y lesbiana”.
Argentina se convirtió el año pasado en el primer país de América Latina en autorizar el matrimonio homosexual a nivel nacional, luego de que Ciudad de México habilitara este tipo de unión a fines de 2009. Uruguay cuenta desde 2008 con un régimen de unión civil con todos los derechos similares al matrimonio y desde 2009 se permitió también por ley la adopción para parejas unidas civilmente.
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