Legisladores de la provincia del Chaco proponen que los funcionarios públicos puedan negarse a celebrar matrimonios entre personas del mismo sexo alegando “objeción de conciencia”.
La Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT) rechazó de manera categórica un proyecto presentado en la legislatura de la provincia del Chaco (nordeste del país), según el cuál los funcionarios públicos podrían negarse a casar homosexuales si va contra sus creencias.
El planteo, promovido por la diputada Elda Pertile, intenta instalar la idea de “la objeción de conciencia”. "Representa un grave retroceso en materia de derechos humanos y ciudadanos, impensado tras la aprobación de la Ley 16.618 de Matrimonio Igualitario, a partir de la cual nuestras familias alcanzaron la igualdad jurídica negada durante tanto tiempo”, señaló Esteban Paulón, presidente de la FALGBT.
“Discriminatoria e inconstitucional”
“La Ley 26.618 de Matrimonio Igualitario no admite la objeción de conciencia. Ningún oficial público puede negarse a celebrar un Matrimonio de personas del mismo sexo y mucho menos un legislador o legisladora impulsar normativa que lo avale, ya que cualquier propuesta de legitimar esta práctica resulta claramente discriminatoria e inconstitucional, desconociendo delitos tipificados en el Código Penal previstos en los arts. 248 y 249 del mismo”, agregó Paulón.
La polémica iniciativa de Pertile fue acompañada por la diputada chaqueña Clelia Ávila, para quién la objeción de conciencia es “un derecho que tiene toda persona para no ser obligado a realizar actos o acciones que contraríen sus convicciones morales, éticas o religiosas”. De formación ultraconservadora, Ávila es la misma legisladora que el año pasado ganó triste notoriedad por definir la homosexualidad como algo “curable” y elogiar a Uganda, un país que, a su criterio, “se enfocó en los valores de la familia.. Trato de enseñar de que la promiscuidad y la homosexualidad los llevaba a la autodestrucción”.
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